martes, 28 de febrero de 2017

La princesa de hielo

Un asesinato en un pequeño pueblo a las afueras de la ciudad, donde nunca pasa nada, conmociona a todos los habitantes de este lugar. Tanto Erica (escritora), como Patrick (policía), se involucran de lleno en este asesinato, además de en comenzar su propia historia de amor. A lo largo de esta obra se van abriendo otra serie de tramas, todas ellas relacionadas con la vida de la víctima, Alex. Una mujer misteriosa, llena de secretos, incluso para su propio marido. Estos misterios se irán revelando a lo largo de todo el libro, de manera lenta pero intrigante, haciendo que el lector no pueda despegar la vista del libro.

Es una obra llena de acción, donde las personalidades de los personajes están muy bien formadas. Donde las intrigas se van creando capítulo a capítulo y, en cada uno, van apareciendo nuevas pistas que, hasta el final del texto no encajan perfectamente como en un puzle. Los capítulos finales son los que hacen que toda la obra cobre sentido, aportando claridad al asesinato, y datos que dejan al lector asombrado. Un final inesperado que se ha ido conformando de una manera muy minuciosa durante todo el libro.

Sin embargo, algo a mejorar sería la traducción de esta editorial concretamente. Aparecen abundantes faltas de ortografía a lo largo de todo el texto, también frases agramaticales, donde se percibe una traducción literal del idioma original del libro, traducción que en español no tiene un sentido completo. También encontramos, en algunos casos, errores sociolingüísticos, un claro ejemplo de ello son los interrogatorios que Patrick les hace a sus sospechosos, al hablar con alguien desconocido y, sobre todo, alguien de avanzada edad, solemos utilizar el pronombre usted, sin embargo en la obra solo encontramos tuteo. 

En general, quitando estas pequeñas observaciones de carácter formal, es un libro muy recomendable para pasar una tarde amena en el sofá leyendo, un libro que engancha y te deja con la expectativa hasta el final.